Placa solar
Aunque a día de hoy es muy común ver paneles fotovoltaicos en los tejados de nuestras viviendas, no todo el mundo tiene claro qué es una placa solar exactamente y para qué sirve.
Llevamos décadas exprimiendo los recursos energéticos fósiles de nuestro planeta y contaminando el entorno natural sin miramientos, y las placas solares permiten acabar con esta dinámica y aprovechar una energía 100% verde y renovable como la proporcionada por el sol. Además, de paso, permiten ahorrar un buen pellizco en las facturas de luz. ¿Quieres saber más sobre ellas y las oportunidades que ofrecen?
¿Qué es una placa solar y cómo funciona?
Una placa solar es un dispositivo que convierte la luz solar en energía eléctrica. Está formada por células fotovoltaicas que, al recibir luz solar, generan corriente eléctrica gracias al efecto fotoeléctrico.
Este efecto se basa en la capacidad de ciertos materiales, como el silicio, de liberar electrones cuando son expuestos a la luz, generando así un flujo de electricidad que puede sustituir a la que suministra la red eléctrica.
Para comprender mejor cómo funciona una placa solar, es necesario saber cuáles son sus principales componentes:
- Células fotovoltaicas, el componente que permite convertir la luz en electricidad.
- Vidrio protector, que cubre las células y las protege de los elementos.
- Capa antirreflectante, para mejorar la absorción de la luz solar.
- Caja de conexiones, que es donde se conectan los cables que conducen la electricidad generada.
Cuando la luz solar incide sobre las células fotovoltaicas, los fotones excitan los electrones del material semiconductor. Este movimiento de electrones provoca una corriente continua (DC) que es transportada a través de los cables hasta el inversor, que convierte esta corriente continua en corriente alterna (AC), la forma de electricidad que usamos en nuestros hogares.
Tipos de paneles solares
Existen dos tipos de paneles solares dependiendo de su función u objetivo.
El primer tipo de panel solar es el que conocemos como panel o placa solar fotovoltaica. Aprovecha la energía que irradia el sol para generar electricidad a través del efecto fotovoltaico. La energía que se produce en este tipo de paneles es corriente continua; la cual se pasa a través de un inversor de corriente para transformarla en corriente alterna. Se usa principalmente a nivel doméstico, en las redes eléctricas generales y en las industrias.
Los colectores solares son los tipos de paneles solares encargados de generar calor y agua caliente. Cuenta con un líquido que absorbe la radiación solar en forma de calor y que después se pasa a un compartimiento de almacenamiento. Posteriormente, el líquido pasa por un intercambiador de calor, en el cual calienta el agua de manera eficiente. Una vez el líquido ha cedido el calor al agua, este sale del intercambiador de calor en estado frío para moverse una vez más al colector solar, en donde inicia su proceso nuevamente. Este tipo de placa solar se usa para generar calefacción y agua caliente en los hogares.
Normativa de las placas solares
En nuestro país, la normativa que regula la instalación y el mantenimiento de placas solares está establecida principalmente por el Real Decreto 244/2019. El gran valor de dicha normativa es que ha simplificado muchos trámites y ha eliminado barreras importantes, como el conocido e impopular ‘impuesto al sol’.
¿Estás pensando en instalar placas solares? ¡Ten en cuenta estos aspectos!
- Las instalaciones de autoconsumo de hasta 100 kW deben inscribirse en el Registro de Autoconsumo de Energía Eléctrica.
- Puedes optar por autoconsumo con o sin excedentes. En el primer modelo, puedes vender la energía sobrante a la red eléctrica, mientras que en el segundo toda la energía producida se consume en el hogar.
- La normativa no detalla en profundidad los requisitos de mantenimiento, pero es recomendable realizar entre dos y tres inspecciones al año para garantizar el buen funcionamiento de las placas, su máxima eficiencia y duración.
- Además, es importante cumplir con las condiciones técnicas y administrativas establecidas por la normativa, como las protecciones eléctricas y los permisos necesarios para la instalación.
Ahora que sabes esto, tan solo te queda pedir presupuesto y empezar a disfrutar de un suministro de energía más limpio y económico. ¡Así de sencillo!
