Geotermia
También conocida como energía geotérmica, la geotermia es una fuente de energía renovable que aprovecha el calor del interior de la tierra para producir energía. Se utiliza para calentar la vivienda, para refrigerar y para proporcionar agua caliente sanitaria a la misma.
Es una fuente de energía renovable, sin emisiones de gases contaminantes y que no requiere de sistema de almacenamiento de combustible. No tiene apenas impacto visual, climatiza en invierno y verano y permite ahorrar en la factura de luz. La única desventaja es que tendrás que hacer un desembolso inicial más elevado que otros sistemas.
Geotermia calefacción, cómo funciona
El sistema de calefacción geotérmico se aprovecha de que la temperatura del subsuelo es siempre constante, incluso en los meses más fríos. Por ello, es muy interesante en climas fríos, aunque también sirve para climas calientes, con un sistema que traslada el calor de dentro hacia afuera.
La geotermia es compatible con radiadores, sistemas de suelo radiante y fan coils. Eso sí, es necesario que se cumplan ciertas condiciones geológicas para implementarlo, realizando un estudio geológico y minero para localizar la zona adecuada. funciona mejor en suelos rocosos que en arcillosos por la retención del calor.
Dependiendo de la profundidad alcanzada, se alcanzarán unas temperaturas u otras. En el uso doméstico, se utiliza la perforación superficial a unos 200 metros, consiguiendo agua a una temperatura de entre 50º y 70ºC. Las perforaciones más profundas tienen varios kilómetros y alcanzan temperaturas de hasta 400ºC, utilizándose para producir electricidad con turbinas de vapor industriales.
Una vez que esté hecho el estudio y la perforación, el sistema funciona mediante un circuito primario o exterior, que contiene agua que circula por el sistema. Puede ser de tipo vertical u horizontal, con algunas diferencias entre ellos. El vertical asegura una temperatura constante y cálida, mientras que el horizontal no ofrece tanto rendimiento y necesita más espacio, aunque es más económico.
En segundo lugar, tiene un circuito secundario o interior, que es el que distribuye el calor a la vivienda y lo reparte. Puede distribuirse a radiadores, fan coils o sistemas de suelo radiante a través de las diferentes habitaciones.
La vivienda debe contar con una bomba de calor, que será la que distribuya la energía por toda la casa. Esta bomba se instalará en una sala de máquinas situada en la vivienda. Para obtener agua caliente sanitaria, también será necesario instalar un acumulador para almacenarla.
