CNE
La Comisión Nacional de la Energía (CNE) fue un organismo determinante a la hora de regular el mercado energético en España. Desde su creación, en 1995, tuvo un papel fundamental a la hora de supervisar y garantizar el correcto funcionamiento de los mercados energéticos del país.
Aunque en 2013 fue integrada en la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), esta ha heredado muchos detalles de su predecesora, ¡por eso es importante conocer los antecedentes para comprender a la perfección cómo funciona el mercado eléctrico en España!
Comisión Nacional de la Energía: Qué es
La CNE se estableció en 1995, aunque en un principio se denominó ‘Comisión del Sistema Eléctrico Nacional’, bajo la Ley 40/1994. Su creación fue la respuesta a la necesidad cada vez más urgente de garantizar un suministro eléctrico seguro para nuestro país que a la vez fuese eficiente e, importante, a un coste razonable para los bolsillos de la sociedad española.
En 1998, con la expansión y mayor interrelación de los mercados energéticos, se transformó en la Comisión Nacional de la Energía (CNE), con competencias ampliadas que le permitieron regular y supervisar tanto el sector eléctrico como el gasista y petrolero.
Hasta 2013, la CNE fue responsable de velar por la transparencia y el cumplimiento de la normativa en estos sectores. Sin embargo, con la creación de la CNMC ese mismo año, sus competencias fueron absorbidas por este nuevo organismo.
El objetivo de esta fusión era claro: centralizar la supervisión en un contexto de austeridad y modernización administrativa tras la crisis económica.
Desde entonces, las competencias de la CNE han evolucionado dentro de la CNMC, adaptándose en todo momento a las nuevas exigencias del mercado energético español, como por ejemplo la transición hacia un modelo más sostenible o la promoción de la competencia efectiva en el sector.
¿Cuál era la función de la Comisión Nacional de Energía?
La función de la CNE era regular la competencia en los sistemas energéticos. Buscaba velar por la transparencia y objetividad con el objetivo de beneficiar tanto a los operadores como a los consumidores. Operaba en el mercado eléctrico y en el de hidrocarburos como el gas natural o el petróleo.
Se creó para unificar el mercado eléctrico, regular este mercado de forma eficiente y supervisar que se cumplieran las normativas. Asimismo, actuaba como consejero del sector público a la hora de publicar normas, para que estuvieran adaptadas a las necesidades reales del mercado.
La CNE operaba apoyada por un Consejo de Administración, con un presidente, un vicepresidente, siete consejeros y un secretario. Era el propio Ministerio de Industria el que elegía a estos miembros mediante Real Decreto. El mandato duraba 6 años, en el cual no podían ser destituidos, aunque tenían un máximo de mandatos hasta la Ley de Economía Sostenible, que redujo la posibilidad de renovación y el número de miembros.
A lo largo de su historia, la Comisión Nacional de Energía tuvo 4 presidentes, incluyendo a Miguel Ángel Fernández Ordóñez (1995-1999), Pedro Meroño (1999-2005), María Teresa Costa (2005-2011) y Alberto Lafuente Félez (2011-2013).
La disolución se produjo por la creación de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia. Este organismo era la unificación de 6 entidades independientes como la CNC, la CNE, la CMT, la CNSP, la CEMA y la CRFA, que pasaría a realizar las funciones de los anteriores en una sola entidad.
Después de su disolución, la CNMC sigue realizando estas funciones dentro del ámbito de la actuación de la energía, colaborando siempre con el mercado europeo con el ACER y CEER. Además de hacer esas funciones, se encargan de establecer peajes, de publicar guías para los consumidores y como entidad colaboradora del MITERD para gestionar las subvenciones del PRTR, para digitalizar redes de distribución e infraestructuras de recarga del coche eléctrico.