¿Cómo ahorrar luz con un termo eléctrico?

En las épocas más frías del año es normal que en nuestras casas empecemos a usar calentadores de agua. El problema se presenta cuando en la factura de servicios se evidencia un consumo elevado de electricidad. Lógicamente, eso se traduce en un mayor gasto de dinero. Si bien el uso de esta herramienta es necesario, ¿qué podemos hacer para ahorrar luz usando un termo eléctrico?

Pues, el simple hecho de tener un termo eléctrico puede suponer un gran gasto. Por eso, en este artículo te mostramos cómo usar de forma más consciente y racional un calentador eléctrico. Y, por supuesto, procurando ahorrar lo más posible en luz.

¿Cuánto consume un termo eléctrico?

Como cabría esperar, esta pregunta no tiene una única respuesta. Son muchos los factores que influyen en el consumo de energía de un termo: el número de personas que habitan en el domicilio, la eficiencia energética del propio termo o, incluso, la propia ubicación de la vivienda. Esto da como resultado que un calentador eléctrico puede gastar entre 400 y 3.000 kilovatios al año. El precio medio mensual durante 2021 de gasto de un termo eléctrico fue de 65 euros.

Cómo ahorrar luz con un termo eléctrico

Aunque parece un gasto elevado, sobre todo con el incremento de precios de los últimos meses, existen ciertos trucos que te permitirán sacar el mayor rendimiento al menor precio posible. A continuación te mostramos algunos de los métodos para ayudarte a ahorrar en tu tarifa de luz.

Utiliza un termo programable y de máxima eficiencia energética

Además de usar un material aislante para cubrir el calentador eléctrico, otra opción es utilizar programador digital. Esta herramienta nos permite ajustar la temperatura y la potencia del termo. Incluso, podemos fijar distintos horarios de uso. Ciertamente, esta última opción nos permite programar determinadas franjas horarias para calentar el agua y disponer de ella cuando la necesitemos. Si tu termo no es programable de serie, siempre podrás incorporar un temporizador digital que funcione de forma automática. Además, es muy importante que cuente con la mejor certificación energética posible. Te aseguramos que es algo que notarás mes a mes.

Ubica el calentador de agua en un puesto estratégico

Así como es conveniente utilizar un programador digital, también se recomienda colocar el calentador eléctrico en el cuarto de baño. Ya que al ser la fuente directa de consumo evita pérdidas de energía en la canalización. Por el contrario, si se coloca en el exterior este proceso puede tornarse dificultoso. De hecho, implica un mayor consumo de energía eléctrica.

Encender el termo en horario de precio reducido

Otra forma de reducir el consumo eléctrico es contratar una tarifa variable en tres tramos. Esta tarifa cuenta con los horarios valle por la noche y además, el 100% de las horas del fin de semana. Con esto, podrías calentar el agua tanto de noche como los fines de semana. De ese modo estarás contribuyendo con el ahorro de luz mientras el desembolso es mucho menor. Esto podrás hacerlo cómodamente usando los programadores que hemos mencionado con anterioridad.

Utiliza perlizadores en los grifos

Si bien las duchas nos permiten ahorrar más agua que los baños, si utilizamos perlizadores para grifos o duchas el consumo se reduce aún más. En este caso, hablamos de pequeños filtros incorporados a las duchas, conocidos como rompeaguas. Básicamente, su función es mezclar las gotas de agua con aire y reducir las salpicaduras. Con eso se logra disminuir el consumo de agua sin repercutir en el uso habitual.

Como has podido notar, usar el calentador eléctrico no tiene por qué ser un dolor de cabeza. Si tomamos las medidas adecuadas, no solo podemos ahorrar agua, sino también luz; lo cual es muy positivo para nuestro bolsillo. Pues, el consumo eléctrico no aumentara drásticamente y las facturas no llegarán por los cielos. Al menos que hagas caso omiso de nuestras recomendaciones.