Certificados medioambientales: ¿qué son y qué tipos hay?

La sociedad cada vez está más concienciada con el medio ambiente, el reciclaje, la reducción de emisiones y la gestión correcta de los residuos. Las empresas forman parte de la sociedad, así que muchas han mejorado sus sistemas para cuidar el planeta en todas sus formas. Las que lo cumplen reciben certificaciones medioambientales que lo acreditan. 

¿Qué son exactamente estos certificados? ¿Para qué sirven? ¿En qué se diferencian? Vamos a responder todas esas preguntas. 

¿Qué son los certificados medioambientales?

La certificación medioambiental es una acreditación que certifica que una empresa u organismo es respetuoso con el medioambiente. Para ello, una entidad de evaluación comprueba que los procesos de gestión productiva, comercial y empresarial de la compañía cumplen con ciertos criterios medioambientales. 

Los criterios varían de una certificación a otra, pero suelen ir ligados al desarrollo sostenible y el cuidado del medioambiente. Por ello, se valora la correcta eficiencia energética, la economía circular y el uso de residuos, el uso de renovables, la reducción de emisiones y la correcta gestión de la materia prima, entre otros parámetros. 

Cuando la empresa cumple con los requisitos, recibirá un certificado, que servirá para demostrar que cumple con estos estándares nacionales o internacionales respetuosos con el medioambiente. 

Estas certificaciones tienen diferentes utilidades. En algunos casos, son obligatorios para poder realizar actividades en ciertos mercados, ya que exigen cumplir estándares ambientales. Otras veces, no son obligatorios, pero ayudan a la empresa a nivel de marketing, especialmente ante consumidores que valoran este aspecto. 

Por otro lado, garantizan el cumplimiento de las políticas de RSC de la empresa en relación a cuestiones medioambientales, ayudando a conseguir una mejor imagen ante clientes, proveedores y la sociedad en general. Es más, incluso puede obtener subvenciones y beneficios fiscales por parte de la Administración. 

Tipos de certificados medioambientales

Hay varias certificaciones medioambientales en España según la AENOR:

• Gestión Ambiental Global: otorgado a empresas que respetan el medio ambiente en sus distintas etapas. Aquí están la Verificación EMAS y el ISO 14011.

• Cambio climático: certificación voluntaria relacionada con gases de efecto invernadero y su emisión. Estarían el ISO 14064, ISO 14067 y la Verificación Reglamentaria de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero según el Protocolo de Kioto. 

• Economía circular: se otorga a las entidades que reutilizan y reciclan los residuos. Tendríamos certificaciones como ISO 14006, ISO 14025 o la certificación Residuo Cero. 

• Sector forestal: otorgado a empresas forestales que gestionan correctamente la materia prima. Las certificaciones más conocidas son la Certificación Forestal o Sistema de Gestión Forestal Sostenible y la Cadena de Custodia de productos forestales. 

• Gestión de recursos: certificados como el Sistema de Gestión de la Eficiencia Energética ISO 50001, ISO 14046 e ISO 37120 acreditan el uso sostenible de las diferentes fuentes de energía. 

¿Cómo se consigue una certificación medioambiental?

Para conseguir certificados de medio ambiente hay que cumplir con los parámetros requeridos por las entidades de certificación. En España, el único Organismo Nacional de Acreditación es la Entidad Nacional de Acreditación o ENAC. Los requisitos varían según la certificación y el organismo, ya no es lo mismo una certificación ambiental de edificios que una del sector forestal. 

Una vez que se conozcan los parámetros y se haya adecuado la empresa a ellos, se deberá abonar un coste de gestión y de acceso a la certificación. A continuación, se realizará una evaluación para comprobar que la compañía cumple con los requisitos. 

La inversión inicial puede ser grande, pero hay que recordar que los beneficios a nivel de imagen son mayores, así como el acceso a ayudas. Asimismo, algunas medidas permiten ahorrar costes a largo plazo, especialmente en lo relativo a la energía y el reciclaje.