Certificado energético
Llamamos certificado energético a un documento que indica todo lo referente a la demanda energética de un inmueble con cédula de habitabilidad. Este documento tiene en cuenta no solo los sistemas de calefacción, refrigeración y agua caliente, sino la ventilación, aislamiento e iluminación del hogar. Permite mostrar el consumo de la casa en gas, luz y otros servicios asociados, permitiendo a propietarios e inquilinos saber lo que pagarán de estos servicios al vivir en ella.
El certificado energético es obligatorio desde junio de 2013 (por la Ley 8/2013), siempre que quieras vender o alquilar una vivienda. Si compraste una vivienda antes de esa fecha y quieres alquilarla, es probable que necesites realizar este trámite. En el caso de no tener el certificado al anunciar tu piso, te enfrentas a una multa de entre 300 y 600 euros.
¿Qué datos contiene?
El certificado energético incluye varios datos como la identificación del edificio y el técnico que lo certifica, el método de cálculo que ha utilizado, la normativa aplicable y una información de las características energéticas.
También incluye una calificación energética. A través del certificado energético se califica la vivienda para obtener la etiqueta energética, que va por letras y colores. El nivel A (color verde oscuro) es el más eficiente, mientras que el G (rojo), es el menos eficiente.
Por último, incluye unas recomendaciones de mejora. Al finalizar, se obtiene la etiqueta energética, que incluye la letra del mismo y también el consumo de energía y emisiones al año.
¿Cómo se puede obtener el certificado energético y cuánto cuesta?
Para conseguir el certificado energético, debes contactar con una empresa autorizada para hacerlo, realizando una solicitud formal. Al hacerlo, un técnico acudirá a la vivienda a recopilar información sobre la misma, incluyendo dimensiones, muros, orientación, ventanas, sistemas de calefacción y sistemas de climatización.
A partir de esos datos, él mismo realizará el cálculo y emitirá el certificado de eficiencia energética, para después registrarlo ante el organismo competente y darle validez (esto último lo debe hacer el propietario). Una vez emitido, tiene validez durante 10 años o hasta que se produzcan cambios en el inmueble que afecten a la clasificación.
En cuanto al coste, no está regulado y depende de lo que quiera cobrarte la empresa elegida, además de las tasas administrativas. Todo esto lo paga el propietario del inmueble en el momento de emisión. El precio suele depender de las características de la vivienda, así como la ubicación y el tamaño. En ocasiones, el precio puede reducirse facilitando los planos de la misma al técnico.
Hay comunidades autónomas que permiten registrar gratis, como Aragón, Andalucía, Asturias, Canarias, Cantabria, Ceuta, Madrid, Navarra y País Vasco, teniendo que pagar solamente al técnico. Del resto, la más cara es Castilla y León con 29,10 euros.
En cuanto al precio del técnico, la media es un precio de 1,50 euros por cada metro cuadrado. De este modo, una vivienda de 50 metros cuesta de media 75 euros más las tasas de cada comunidad autónoma.
